El Nublao

Al caer el sol, Teofilo tenía por costumbre pararse en La Tasca, siempre acompañado de su único hijo. A aquellas horas, los parroquianos estaban de vuelta de las tareas del campo, o de dar de comer a los animales. Se juntaban a tomar unos chatos de vino y algún que otro porrón con sifón, o... Leer más →

Esta web funciona gracias a WordPress.com.

Subir ↑

A %d blogueros les gusta esto: