Maldita espera

El dolor de cabeza me persigue. Cuando duermo demasiado —más de siete horas— la jaqueca o la migraña —qué más da cómo la llame— despierta conmigo y no me abandona hasta que la asusto con un par de pastillas blancas, un poco de cafeína y algo de sol. Hoy se empeña en quedarse y se... Leer más →

Perdón por las ausencias

Escribir es un ejercicio de introspección, de reflexión de mí misma y de mi entorno. Tras la fantasía de cualquiera de mis historias siempre hay alguna parte de realidad velada; otras veces, la realidad supera la ficción y la historia se convierte en increíble. Esto no es una novedad, les pasa a todos y a... Leer más →

Al otro lado

Vi una mujer llorar. Lágrimas cargadas de cansancio, de impotencia, de amor, de dolor. Vi una mujer llorar cuidando de un hombre que era su tío, un hombre grande y enfermo. Un hombre cargado con más de nueve decenas de años anquilosando su cuerpo, quebrando sus huesos, borrando su mente. Vi unos ojos enrojecidos, una... Leer más →

Esta web funciona gracias a WordPress.com.

Subir ↑

A %d blogueros les gusta esto: